Con objeto de enmarcar el centro del comentario de esta ocasión, ruego a los lectores su comprensión al referirme de nuevo a una experiencia personal.

Con objeto de enmarcar el centro del comentario de esta ocasión, ruego a los lectores su comprensión al referirme de nuevo a una experiencia personal. La religiosa Graciela Lara Abarca, oriunda de Tanhuato y perteneciente a la congregación: Hermanas de las Pobres Siervas del Sagrado Corazón, representa una de esas claras muestras de una persona que nació y se formo para servir a los demás.Su recia personalidad amalgama el perfil de quienes impactan y se imponen con su sola presencia, al observarla, lo mismo refleja firmeza o un profundo amor y compasión por sus semejantes.Le conocí cuando mis hijas ingresaron al Colegio Las Rosas ubicado frente a la Basílica de Guadalupe, en la ciudad de México: Gabriela en secundaria y Mariana en Kinder . Desde el principio de un trato que duro varios años, primero como padre de familia y después en calidad de miembro del cuerpo docente en preparatoria, recibí de su parte atenciones, respeto y todo tipo de consideraciones, imagino que quizás el aprecio y la confianza iniciaron al darse cuenta ella de la vecindad de nuestros lugares de origen, el caso es que en trato personal me daba el lujo de decirle “Paisana”.Muchos recuerdas y anécdotas tengo de la época que viví en la Institución, en este caso are referencia a uno. El colegio contaba con estudios desde el kinder , hasta la licenciatura en educación, y era uno de los de mayor prestigio en el norte de una Ciudad de México.La madre Graciela fungía entonces como superiora del colegio y se desempeñaba también como directora de primaria y preparatoria.Al concluir la construcción de un nuevo edificio para la preparatoria y conociendo de mis necesidades, me invito a colaborar en la institución a cargo de la biblioteca; con frecuencia convocaba al personal a reuniones de trabajo, que bien podrían ser de capacitación, formación, evaluación y a veces de convivencia. Recuerdo que en una de tantas analizábamos el comportamiento de las alumnas sujetas a una sociedad agresiva en todos los sentidos, como lo representan la ciudad de México, pasando por algunos padres de familia que reflejaban que tal vez lo que menos les importaba era la instrucción y formación de sus hijas; por el desapego, falta de atención e interés en la educación de aquellas estudiantes de preparatoria, todas unas mujercitas en pleno desarrollo.La actuación del personal docente no escapo al escrutinio, pues se rumoraba que algunos maestros se mostraban condescendientes en el trato y otorgamiento de calificaciones para ciertas alumnas; o bien, que por ahí algún profesor manifestaba evidente interés por otra maestra, muy ajeno al laboral.La madre Graciela “Tomo el toro por los cuernos” y llamó al pan pan y al vino vino y contundente nos manifestó: “Hay que partir de la realidad” y si aquí tenemos maestros enamorados, a la primer evidencia se irán a sus casas.Ahí esta la clave: partir de la realidad; no intentar tapar el sol con un dedo; cubrir el ojo al macho; o, como el tío Lolo, hacerse pendejo solo.La autoridad municipal debe reconocer que en materia de policía y buen gobierno, le ha fallado a la ciudadanía; pues resulta incomprensible que ante tanto reclamo para evitar el consumo de bebidas alcohólicas en el centro de la ciudad, en plena Plaza Publica, se sigan dando los espectáculos bochornosos del pasado día 20, aniversario N.-98 del inicio de la Revolución Mexicana.


De nueva cuenta: abuso en la ingestión de alcohol, sobre todo en los jóvenes (hombres y mujeres) que en total estado de ebriedad lo mismo se “miaban”, “agasajaban” o peleaban frente a quien los quisiera ver. ¿Y la “policía pre… ven… ti.. va”? sorprendiendo a los borrachos en plena descarga de orines, para remitirlos a la comandancia y previa multa de $200¨, soltarlos para que continuaran con la “Celebración”, hubo momentos, en que se vio que la comandancia estaba hasta el tope de jovencitos en espera de la llegada de un familiar o amigo; para que les ayudaran a “Ponerse a mano”. Mire usted: Hasta una “Banda” ?? Completa, si, de esas que vienen con sus “Pitos desempleados” a llevarse un dinero fácil, paró con sus huesos en la comandancia, previamente les habían cobrado $300¨ para permitirles “tocar”?? Para iniciada la noche, correrlos del centro.¡A tocar pitos a otro lado! Vaya forma tan fácil de recabar ingresos por parte de la autoridad.Pero por favor, usted no se preocupe, Yurécuaro se prepara en grande para celebrar el Bicentenario de la Independencia y el Centenario de la Revolución el cada vez mas cercano 2010,y como en el pueblo la mejor manera de “celebrar” es en estas fechas con el consumo desmedido de “Bebidas espirituosas” , seguramente llamaremos la atención de propios y extraños; al fin y al cabo la gaceta oficial del gobierno municipal nos presenta otro panorama al señalar que las pasadas fiestas patrias se celebraron en un “ambiente familiar”¡ SI CHUCHA!.Y la mejor se la reservo para el final.El pasado día 20, alrededor de las 20:30 hrs., en la esquina de Guerrero y Constitución, el comandante de turno trato por todos los medios de convencer a conocido comerciante para que dejara de escandalizar a fuera de su negocio con “Banda y toda la cosa”¿ Y sabe la respuesta?Abrió totalmente el establecimiento y continúo en lo “Suyo”.Pero: permítame en ese momento con otra banda (en exceso desafinada) intentaba ingresar por ese lugar y al centro, una camioneta Pick up a bordo de la cual s encontraba un cuate muy conocido “Júnior”, por supuesto.Se dirige a él el comandante y por respuesta le contestan (dirigiéndose a los “músicos”): “Ustedes toquen….a nosotros nos pelan….los dientes”; y continuaron su marcha para estacionarse en batería y en el centro.¡ ESA ES NUESTRA REALIDAD¡