Así rezaba un comercial que a diario, y precisamente a esa hora se trasmitía por radio, para llamar la tención de los Padres de Familia con objeto de estar mas al pendiente del destino de nuestros hijos.No recuerdo bien, pero sería al final de la década de los 80's o principios de los 90's, seguramente el diseño y patrocinio de esta campaña corría a cargo de lo que hoy se conoce como el Consejo de la Comunicación, entonces denominado el Consejo Nacional de la Publicidad, Institución de Servicio Público, pero conformada por empresas privadas, y ahí se afiliaban las organizaciones que mas invertían en publicidad en nuestro país; es decir las grandes corporaciones. Por esa época, si mal no recuerdo, lo presidía el también Presidente del consejo de administración de Bacardí y Cia., Isaac Chertorivsky todo un personaje del mundo de los negocios.Este organismo, que seguramente promueve y fomenta la importancia que para las empresas reviste el publicitarse, también y con frecuencia lleva a cabo exitosas campañas de publicidad, para enaltecer los valores que como mexicanos tenemos, enfocando algunos de ellos a la reflexión, sobre la importancia de la unidad e integración familiar.Desde luego que resulta de vital importancia el vigilar de cerca las actividades que realizan nuestros hijos, principalmente durante su tiempo libre, sin pasar por alto el conocer los lugares que frecuentan y el perfil de sus amistades.Ahora bien, y que mejor desde temprana edad, propiciar y facilitar su incorporación a la practica del deporte; así como vigilar a que su diversión y entretenimiento se de en un ambiente sano (participación en actividades culturales, artísticas y de complementación educativa).Pero, lo fundamental y sin duda, será la educación de calidad que se les pueda ofrecer.Entendemos que una educación integral está formada por dos vertientes; una resulta ser la instrucción que se les imparte en la escuela y de la cual debemos tomar parte activa; la otra parte, que para el caso denominares como la formación, es la que con buen trato y ejemplo ofrecemos a diario y en casa a los hijos.La Formación se nutre principalmente de valores, mismos que habremos de inculcar desde siempre y para siempre en el seno familiar.Los niños, la juventud, tan expertos y proclives hoy en día a caer en el fantasioso y alucinante mundo de la delincuencia, el vicio y las adicciones, sin valores que les permitan discernir entre lo bueno y lo malo; lo que conviene, y lo que no, son presa fácil de todo tipo de tentaciones y asechanzas, mismas que se encuentran en cualquier círculo que les rodea, inclusive en la propia familia.¿Y cuales serian estos valores?Independientemente de los que a usted le acomoden, apunte:El Respeto, Pues quien respeta, será respetable.
La Honradez, Quien la practica, conoce perfectamente lo que le es propio y lo ajeno.
La Honestidad, Entendida por un lado como la preservación de la Honra, y por el otro, como la congruencia entre el decir y el hacer.
La Justicia, Dar la razón a quien la tiene, y saber que el derecho de unos termina donde empieza el de los demás.
La Tolerancia, Entender que la diversidad y pluralidad existen y exigen respeto.La Prudencia, Saber que se aprende mas al escuchar que al hablar.
La Solidaridad, Apoyar a quienes carecen de lo indispensable, dolerse del dolor de los demás.
Y así podremos continuar con esta lista interminable de Valores, cuya práctica no solo aportará buenos Hijos, Padres y Ciudadanos, sino verdaderos hombres y mujeres de verdad y virtuosos.
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