VIENTOS DE CAMBIO EN CONCIERTO

sábado, 21 de febrero de 2009

En primer término, es justo reconocer públicamente la falta de respeto de un servidor para con sus lectores

En primer término, es justo reconocer públicamente la falta de respeto de un servidor para con sus lectores, porque en algunas ocasiones he faltado al compromiso con ustedes de presentar en tiempo y forma la colaboración semanal.En ocasiones se debe a cargas de trabajo personal y porqué no decirlo la inspiración no viene a mí, o de plano, soy presa de lo más grave, la flojera.¡En fín, sea por Dios, soy un desastre!.MIL DISCULPAS.En la edición anterior y en el espacio reservado a la columna “Vientos de Cambio” que mal escribe su servidor y peor trascribe tallito, se daba cuenta de un extracto del premio Novel Gabriel García Márquez, en relación a los riesgos y terribles consecuencias que acarrea el rumor y al final una nota sobre la recesión que lamentablemente forma parte de una indiscutible realidad económica.Muy honrado de compartir espacio con una personalidad como el literato Colombiano, y respetuoso de la opinión de quien haya estado a cargo de la recopilación de la información he de señalar que nó comparto la opinión de conjuntar dos situaciones reales sí, pero diametralmente opuestas.Porqué, relacionar un texto del escritor con un mensaje cándido tendente a minimizar una grave situación económica, sería equiparable a intentar mezclar el agua con el aceite.En esta ocasión dejemos de lado la macroeconomía para los expertos y hagamos un esfuerzo por desconocer que existe una grave recesión de alcance mundial.Ignore usted que el Presidente del país económicamente más poderoso sobre la tierra firmó ya el paquete financiero que previamente le autorizó el Senado Norteamericano, por mas de 700,000 millones de dólares (si escribirlo da trabajo entenderlo más, toda una fortuna).Y lo que si es cierto, es que a pesar de la fuerte dependencia económica de nuestro país con los vecinos del norte, y dado que el proceso recesivo es más grave que los pronósticos mas alentadores y lejos está de tocar fin; los recursos que habrán de canalizarse a favor del rescate financiero del aparato productivo Estadounidense; para reactivar el crédito a los particulares y sostener al menos los empleos que prevalecen; entre otras acciones, darán resultados visibles (si todo marcha bien) a mediados del 2010 (si, pero allá).Haga de cuenta también, que las acciones emprendidas por el gobierno federal a principios de enero con bajas al gas doméstico, congelación de precios y tarifas de productos y servicios públicos, así como medidas para mantener el empleo y el ingreso, no tendrán un impacto inmediato en la economía del país y en le bolsillo de los Mexicanos.Situémonos entonces aquí, en la microeconomía, en la región, en el ámbito local y veamos:En primer término, diré, y no con el ánimo de evadir la responsabilidad, o justificar mi desconocimiento en materia de economía, que esta ciencia es tan compleja que en ocasiones ni los expertos se ponen de acuerdo en establecer un pronóstico semejante, cuando están en juego un sinnúmero de variables de incierto comportamiento.Como las matemáticas establecen que “El orden de los factores no altera el producto”, señalaré que los principales rubros que generan economía he ingresos al municipio son:Agricultura.- en tanto no se haga uso de la tecnología de punta, sobre todo en la producción de hortalizas y granos; con apoyos inadecuados e inapropiados de los 3 niveles de gobierno; con bajos parámetros de asistencia técnica, asesoría y gestión en el municipio; con insumos caros; falta de organización de productores; carencia de conocimientos y capacitación en materia de comercialización por parte del productor; desconocimiento y respeto de la Legislación Relativa a la sanidad vegetal; el echo de “colocar todos lo huevos en la misma canasta”, es decir atender solo al mercado doméstico, sin incursionar en otros mercados internacionales; el sector seguirá padeciendo las más graves consecuencias. Una prueba: el cultivo del tomate año con año ha venido a menos, constancia de ello en el ciclo que recién concluyó los grandes productores locales sembraron granos, gracias a las plagas y a los altos costos de la mano de obra que ante la falta de unidad, ellos mismos propician.Remesas.- cálculos conservadores en la localidad señalan una baja de un 20% en el monto de los envíos, bien sea porque nuestros paisanos temporalmente han dejado de trabajar.El número de “cheques” ha bajado; o porque las remesas sean de menor cuantía, o por períodos mas largos, el caso es que este “dinero fresco” que de inmediato se inserta en le consumo, continuará su descenso dado que los lugares donde se emplean en el “otro lado”, no han recibido de lleno el embate de la rescisión en Norteamérica.Producción de artículos en la confección, religiosos y otros.- Ante un mercado nacional contraído; falta de apoyos y desconocimiento de los programas oficiales en materia de financiamiento, comercialización, capacitación, asistencia técnica y gestión por parte de la autoridad local y de los productores; la ausencia de organización y unidad de cara a una problemática afín; procesos de producción en algunos casos arcaicos, elevan los costos de producción y agravan la situación del sector; sume usted que los productores por desconocimiento y falta de apoyo no participan en ferias y exposiciones, desaprovechando estos y otros mecanismos de promoción y fomento, los enfrenta a una competencia entre desiguales.Comercio.- Los establecimientos comerciales constituyen el eslabón mas sensible: “No hay dinero, no hay ventas”; los costos de las mercancías se elevan y sus precios fuera del alcance del consumidor; sobreviven a base de ofertas y descuentos.Ante este negro panorama, no será hora de que la Autoridad Municipal propicie el establecimiento de una mesa de diálogo, donde el análisis y las propuestas entre productores, comerciantes y la autoridad fluyan y se establezcan acuerdos y compromisos. De cualquier forma mercado creciente, demandante siempre habrá, la crisis tocará fondo y la coyuntura se remontará.Finalmente, tarde o temprano, veremos en el fondo del túnel la luz, solo espero que no sea el faro del tren que viene en sentido contrario y termine por Arrollarnos.Servidos

domingo, 8 de febrero de 2009

No cabe duda: “Recordar es vivir”.

ESCOLTA DE LA SECUNDARIA JUSTO SIERRA.Izquierda a derecha: Juan Mandujado, Roberto Becerra (Abanderado) Anastasio Bustos y Tomás Baeza (atrás) Sergio Lee y Jesús González (1964)
Alumnos de la Secundaria Justo Sierra con el entonces Maestro José (”Don Pepe”) Gonzalez Flores

El 24 de octubre día de las Naciones Unidas Alumnos de la Secundaria Justo Sierra caracterizando a los Estados Unidos.Abanderada: Leticia Rizo Carrillo.


No cabe duda: “Recordar es vivir”.Pareciera que fue ayer, en 1964 un grupo menor a 40 alumnos iniciábamos nuestros estudios de nivel medio en la Escuela Secundaria “Maestro Justo Sierra”.

Ese mismo año, habían concluido sus estudios secundarios los integrantes de la primera generación; esto es, la 62-64. Precisamente en 1962 y gracias a la visión de un pequeño grupo de maestros, encabezados por el entonces Inspector Escolar de la Zona, el Profesor Tapia Rangel y entre quienes se encontraban profesoras de primaria como Elisita Salazar, Aída Gil Salazar y los profesores Guadalupe Fuentes Ramírez, Ignacio Bedolla, Adán Estrada y Plutarco Martínez; así como Jorge Echegollen propietario de una farmacia y Francisco Solorio quien tenía cualidades para el dibujo, así como José (Don Pepe entonces) González Flores, QEPD Pbro. José González Flores.

Iniciaron los trabajos y la docencia del plantel en las instalaciones de lo que hoy es la escuela primaria Emiliano Zapata en la colonia 1 de Mayo (“El Acha”). Hasta entonces, realizar estudios de Secundaria resultaba sumamente difícil para los alumnos que lograban concluir la primaria; para las mujeres de entonces ¡Que esperanzas! Las costumbres que prevalecían en nuestra sociedad y la mentalidad de los padres de familia les rezaban el camino para realizar estudios fuera de la población.Para entonces en la secundaria Rafael Reyes de la Piedad, cursaban sus estudios 25 alumnos de Yurécuaro, rodeados de limitaciones de todo tipo y enfrentados a la adversidad de tener que ir y venir a diario, con el trasporte de la época y con un camino de terracería.

Hoy en día, decir: “Voy a la Piedad” suena fácil, recorrer 36 km. En 25 minutos, también; pero en aquellos años, sobre todo en los meses de la temporada de lluvias, resultaba toda una proeza. Los alumnos de entonces, no sabían si llegarían en el mejor de los casos a tiempo a sus clases y las mas de las veces se quedaban en le camino con los camiones y “autobuses” atascados en el lodo y el fango infinidad de ocasiones, la angustia de los padres resultaba mayor, los hijos no regresaban o llegaban de la escuela entrada la noche o de madrugada, con el calzado y ropas totalmente impregnados de lodo y mojados.Muy pocos, cuyos padres contaban con recursos enviaban a estudiar a sus hijos a la Barca, Zamora o Guadalajara, pero eran los menos.

De ahí que la iniciativa de impulsar la creación de una escuela secundaria en nuestra población, recibió el beneplácito de autoridades, padres de familia y la sociedad en su conjunto.Por favor: no quiero dejar en el ánimo del lector la idea de que “todo tiempo pasado fue mejor” ¡de ninguna manera! Pero algo sucedía entonces en nuestra población que permitió amalgamar la vocación por la enseñanza y la pasión con que nos impartían las clases los maestros; el ferviente propósito de nuestros padres por legarnos al menos un poco más de “Escuela”; el altruismo de notables bienhechores de la época y el apoyo de las autoridades, que nos impulsó a seguir adelante con los estudios, logrando así y pese a la adversidad, estudiantes destacados y brillantes profesionistas en diversas disciplinas del conocimiento.

Por ello, y a todos ellos, nuestro más profundo agradecimiento por contribuir a la formación de mujeres y hombres de provecho; me expreso en plural, porque estoy seguro que mis compañeros de entonces y de ahora de la escuela secundaria Justo Sierra, pensarán seguramente igual que su servidor.

Pero… ¡Que sucede hoy en Yurécuaro a casi 50 años de la fundación de la escuela Secundaria, de cuyas aulas han egresado generaciones de jóvenes talentosos y exitosos profesionistas que mas bien son reconocidos y aprovechados en otros lugares, inclusive allende de nuestras fronteras!Lamentablemente, también, en el camino y por diversas razones vemos a esos jóvenes truncar sus estudios, de frente a la frustración por carecer de fuentes de trabajo dignas y remuneradas.
¡A donde están aquellos personajes visionarios, distinguidos y comprometidos con nuestra gente!¡Que sucede en el seno de esta sociedad tan indiferente, complaciente y permisiva de cara a los jinetes apocalípticos de las adicciones, los excesos, la falta de oportunidades, el bienestar, el respeto al derecho de los demás, la carencia de valores, etc, etc!.
Estas y otras cuestiones forman parte de la agenda, de la tarea que en Conjunto debemos resolver sociedad y gobierno.El proyecto se llama Yurécuaro y resulta de mayor importancia su discusión, su resolución; tal y como en su tiempo se atendió la creación de la secundaria.Esta obra no será resuelta como algunos piensan con toneladas de cemento, sino con acciones que calen en lo más profundo de nuestra sociedad, mirando siempre un mejor futuro para todos.Enhorabuena a la comunidad educativa de la Escuela Secundaria Maestro Justo Sierra.Felicidades por esos 47 años de fructífera labor a favor de la educación en Yurécuaro.